
El dirigente aguadista no fue tan directo, pero ni falta hizo; bastó que planteara que la UCR de Córdoba logró una conducción partidaria surgida de un acuerdo, y que ese ejemplo debería transmitirse al Comité Nacional. Especialmente, señaló la inconveniencia que desde la presidencia del Comité Nacional se dispare una nueva corriente interna (que, por otra parte, es un intento por frenar el cobismo al que adscribe Aguad).Las únicas protestas se escucharon desde el negrismo, cuyos representantes ayer fueron Silvina Leonelli, Alejandra Bijelich y Antonio Capra. Leonelli consideró que aprobar ese texto significaría jugar al internismo, por lo que se estaría provocando el efecto inverso al manifestado.
En el tono calmo que caracterizó a la primera reunión, la discusión no causó un inmediato recalentamiento de la oficina presidencial (ayer no se usó la tradicional oficina de los retratos).S
e resolvió, apenas, que mañana haya una nueva reunión, en la que se tratará un documento en el que varios secretarios del Comité tratarán de colocar sus párrafos favoritos. Por ejemplo, el becerrista Martín Lucas aprovechó para insistir en que haya una actitud de consenso en el radicalismo de Córdoba, similar a la que se reclama para el Comité Nacional.Además, ayer comenzó a conversarse el reparto de las secretarías, lo que también terminará de definirse en el encuentro de hoy.Respecto al acto de celebración por la asunción de Bruno, ahora se menciona como fecha probable el martes próximo (¡martes 13!), y ya no el viernes 9, en razón de que, según se explicó, ese día sesionará la Cámara de Senadores para tratar la Ley de Medios, y se pretendería que lleguen a Córdoba radicales de todo el país.
Fuente: La Mañana - Martes 6 de Octubre de 2009