Frustrado, el jefe del Partido Nuevo acusó a Mestre y a los intendentes de ser funcionales al peronismo.
Como en la fábula “La zorra y las uvas”, Luis Juez intentó atrapar a los radicales, y al fracasar, los consideró inapropiados para él. Con mejores modales que en 2007, trató de seducirlos con heroicas invocaciones antikirchneristas y, también, con mundanas sugerencias de que podrían ganar cuatro o hasta cinco diputados nacionales, banquete que en la UCR no se dan hace diez años. Como la mayoría lo rechazó, Juez, que pretendía a la UCR para hacerla funcional a sus aspiraciones de convertirse en gobernador dentro de dos años, reaccionó ayer acusando a quienes pretendía de aliados de colaborar con el peronismo. Dejó a salvo a Mario Negri, su socio en el Pacto de Oliva. Igual, permanece un interrogante: ¿seguirá la presión de la UCR nacional para obligar a los radicales cordobeses a pactar con Juez?“
Los tiempos de la República no son los tiempos del Comité”, escribió Juez en la carta que le dirigió ayer a Negri para anunciarle que ya no esperará más a los radicales en el altar aliancista. La frase, con aspiraciones de quedar en el bronce, esconde también el desprecio que siente el cacique del Partido Nuevo por los mecanismos democráticos internos de los partidos políticos.
El radicalismo debate hace mucho tiempo la alianza con Juez. En contra se manifestaron el dirigente con mejor imagen en la ciudad de Córdoba, Ramón Mestre, el presidente del Comité capitalino, Miguel Nicolás, la gran mayoría de los intendentes del interior y otros muchos dirigentes. A favor estuvieron el presidente de la UCR provincial, Negri, y el diputado nacional Oscar Aguad.Negri quiso reunir al Congreso partidario para jugar allí una de sus últimas cartas, pero no consiguió los votos que la Carta Orgánica exige. Y se frustró porque le faltó el apoyo político necesario. No hubo una conspiración antidemocrática, como sugirieron el titular de la UCR nacional, Gerardo Morales, y el propio Negri, en sus declaraciones de ayer.“En Córdoba se impidió por parte de algunos dirigentes tener un debate orgánico y las consecuencias serán graves y absolutamente negativas”, protestó el entrerriano. Además, acusó que “hay radicales de buena fe, a quienes respeto, que piensan que se puede ganar solo, pero también es cierto que se perdió autonomía en la UCR, y las influencias de los gobiernos nacional y provincial prevalecen enormemente en algunas decisiones”. Con argumentos parecidos en Salta se pidió la intervención al partido.Negri reclamó como último esfuerzo pactista “un segundo de sensatez” a la dirigencia cordobesa. Habrá que esperar a la Convención Nacional de la UCR, que se hará en Mar del Plata el próximo fin de semana, para saber si esa invocación va de la mano de algún tipo de presión.
Claro que en sus declaraciones Juez fue muy duro con los radicales antipactistas, lo que vuelve muy difícil un cambio de rumbo. Por ejemplo, calificó a los intendentes radicales de “punteros políticos” y de que “viven colgados de la bragueta” del oficialismo provincial. “Peléense entre ustedes, mátense entre ustedes, esa pelea no es mía ni tampoco de los cordobeses”, les dijo.La posibilidad de que algún dirigente radical huya de la estructura partidaria y se lance a los brazos de Juez, rumor que se personifica en Oscar Aguad y, en menor medida, en Mario Negri (ambos nunca admitieron algo así), quedó también erosionado por las afirmaciones del jefe del Partido Nuevo al descartar la existencia de un segundo Rins: “Yo no quiero explorar ninguna alternativa con la UCR”.
De todos modos, un dirigente muy cercano al ex intendente aceptó que “si la UCR se arrepiente y nos invita a hablar lo vamos a pensar”. Hay una tenue llamita encendida en la lámpara votiva del Pacto de Oliva.Juez afirmó que el Frente Cívico irá con candidatos propios a la elección del 28 de junio. Ahora, partidos pequeños, como el socialista, el ARI (o su álter ego, la Coalición Cívica), la Unión Vecinal Federal y hasta Libres del Sur se abalanzarán sobre los renglones en blanco en las listas de candidatos a senadores y diputados nacionales.
Fuente: La Mañana de Córdoba - Jueves 26 de marzo de 2009